Cerremos lo ojos unos segundos e imaginemos la cheesecake perfecta. Estamos seguros que si comparásemos cada una de las deliciosas tartas de queso a las que nuestra imaginación nos ha transportado, diferirían mucho entre sí, pero todas ellas entrarían a formar parte del suculento reino de los mejores pasteles de queso.
¿Qué es una tarta de queso?
Un tarta de queso es algo tan sencillo como una elaboración dulce, horneada o no, cuyo ingrediente principal es el queso mezclado con azúcar y huevos… A partir de ahí la fantasía es la protagonista absoluta y podemos encontrarnos una variedad infinita de recetas de tartas de queso con sabores, texturas y acabados diferentes. Hay una gran diversidad de tartas de queso, dependiendo del país y las costumbres de cada región descubriremos diferentes variaciones de este delicado bocado al que se le atribuye origen europeo. Sin embargo, hay que reconocer que es al otro lado del Atlántico donde la cheesecake de queso crema se ha convertido en la protagonista indiscutible de todos las sobremesas, volviendo a nosotros con renovada popularidad.
El queso crema, el ingrediente estrella
El ingrediente esencial de toda cheesecake que presuma de serlo es un buen queso crema. Podemos afirmar sin miedo a equivocarnos, que la tarta de queso es la aplicación estrella de esta modalidad de queso cremoso y untable. Es lo que llamamos una love story en toda regla, ¡para felicidad de todos los golosos del mundo!
Los motivos son de peso, el queso crema da a las tartas de queso cremosidad, una buena estructura y un delicioso sabor. Dependiendo del tipo de cheesecake que queramos elaborar habrá un queso crema más apropiado para cada caso. Pero en todas tendremos que tener en cuenta algo fundamental, la calidad del queso crema que empleemos. El equilibrio entre grasas y proteínas tiene que ser adecuado para la receta que pretendamos llevar a cabo, así como su contenido en estabilizantes para asegurar la mayor o menor firmeza de nuestra elaboración. Esto que a priori puede parecer muy complicado es mucho más fácil de lo que imaginas. Para ayudarte a realizar la cheesecake perfecta, cualquiera que sea la receta que tengas en mente, repasaremos todo lo que necesitas saber para conseguir resultados como el mejor de los pastry chef.
Tipos de tartas de queso
No vamos a abrumarte con datos históricos. Solo contarte que ya en la Antigua Roma en la ofrendas a los templos, se incluía una elaboración de queso, harina, huevos y miel que se horneaba. Con estos sencillos ingredientes, es fácil pensar que la receta se extendiera por toda Europa de la mano de la expansión romana. Así llegamos hasta el siglo XIV en Francia, época en la que se tiene constancia de la publicación más antigua de una receta de pastel de queso integrada en un recetario. En siglos venideros con el éxodo de europeos a América, la elaboración y sus variantes se extenderían por todo el continente americano…
Hasta llegar a tu moderno horno eléctrico pirolítico con control de tiempo y temperatura ha llovido mucho. En la actualidad podemos encontrarnos todo tipo de tartas de queso, desde las creaciones más sencillas, que recuerdan a los que pudieron ser los orígenes de la cheesecake, hasta el pastel de queso más sofisticado y elaborado. Cada una de ellas requiere su propia técnica e ingredientes y conocer las nociones básicas te asegurará éxito en su elaboración. Vamos a hacer un repaso a los diferentes tipos de tartas de queso destacando sus particularidades y los mejores quesos crema a emplear en ellas.
Diferenciaremos en primer lugar dos tipos esenciales de cheesecake, las cuales a su vez se subdividen en una gran variedad de recetas, hablamos de la tarta de queso horneada y la tarta de queso fría sin cocción. Las diferencias entre ellas son considerables en textura y sabor, teniendo en cuenta que unas solidifican con calor y otras en frío y requieren de diferentes ingredientes y proporciones.
Tarta de queso horneada
La horneada es una de las cheesecake más tradicionales y toda una lección de simplicidad en la cocina. Partiendo de tres ingredientes básicos, queso crema en una proporción del 40-50%, azúcar y huevos, el resultado es un dulce sencillo pero exquisito al paladar. Su característica esencial es que su cocción es en horno, ya sea directamente o al baño María, a temperaturas moderadas de horneado que oscilan entre los 160º y los 200º. Partiendo de esta receta base, algunas modalidades de cheesecake horneadas pueden llevar otros ingredientes lácteos como mantequilla, nata ácida, leche u otros tipos de quesos.
En su receta más básica es una de las tartas más fáciles de elaborar y permite infinidad de variantes para jugar y divertirse en la cocina, pudiendo convertirse en la más sofisticada de las elaboraciones. Nuestros productos más idóneos para este tipo de recetas son el Queso Crema Quescrem Natural, disponible en versiones 0% lactosa, light y bio. Posee una equilibrada composición que lo hace muy cremoso, sin restarle por ello ligereza, asegurándonos una tarta de queso cremosa y esponjosa muyestable tras el horneado. Su sabor es natural y muy fresco, lo cual nos permite combinarlo con infinidad de sabores, con la ventaja añadida de que emulsiona a la perfección con otras grasas y líquidos.
Otra opción es nuestro Queso Crema Receta Original, ideal para aquellas elaboraciones que necesitan de un queso crema de textura consistente, que garantice un horneado sin sorpresas desagradables como grietas o zonas hundidas. Este es el caso de las tartas de queso estilo americano, como la New York Cheesecake o la tarta de queso tipo Philadelphia.
También la tarta de queso vasca, o tarta «de La Viña», también conocida como burnt Basque cheesecake, es una tarta de queso de tipo horneada muy fácil de preparar y para la que es ideal nuestro Quescrem Natural.
Si te apetece experimentar con el paladar prueba con nuestros Quescrem Sabores, especialmente las variedades pimienta rosa, queso manchego y queso azul para elaborar tartas de queso con mucha personalidad con todos beneficios del queso crema en este tipo de creaciones.
Pastel de queso frío sin hornear
Si dispones de poco tiempo, te da miedo el horno o hace demasiado calor para encenderlo, el pastel de queso frío o sin hornear es el más rápido de hacer y la mejor de tus opciones. También es una alternativa perfecta para aquellos que prefieren unatarta de queso más ligera. Una tarta de queso sin hornear no lleva huevos ni el paso adicional de cocción que es sustituido por el frío en nevera. Por todo ello, son tartas más finas y no suelen sobrepasar los 5 cm de altura. La proporción de queso crema suele ser menor que en la tarta de queso horneada, entre un 20-30%.
Es una receta sencilla a la que generalmente se le añade gelatina neutra u otro tipo de cuajo para dar estabilidad a la fórmula tras pasar por el proceso de enfriado. Su sabor es más neutro que el de la tarta de queso horneada, con una textura más similar a un pudding o cuajada. De ahí la importancia de elegir un queso crema de sabor fresco y láctico, con una textura muy cremosa para que de carácter a nuestra cheesecake fría. Son tartas que suelen presentarse con una ligera base en forma de costra de galletas molida mezclada con mantequilla. La función es doble, sostener la elaboración y al mismo tiempo, dar un contraste crujiente y sabroso. Además, nos permite jugar con diferentes tipos de galletas (las especiadas speculoos, integrales tipo graham o incluso con un toque de sal) para dar diferentes matices a la receta.
Nuestros quesos crema más aptos para este tipo de cheesecake fría son el Queso Crema Quescrem Natural y el Queso Crema Receta Original. Este último resulta de gran ayuda en esta modalidad de tarta de queso en frío, ya que su especial composición con mayor proporción de queso permite reducir la cantidad de gelatina de la receta. Al mismo tiempo, acelera su cuajado y ayuda a mantenerla más estable por más tiempo. Otra opción también aplicable en las elaboraciones de pastel de queso sin horno, es nuestra modalidad de Quescrem Sabores siempre que quieras añadirle un toque distintivo. Puedes emplearlos solos o mezclándolos con otras de nuestras variedades de queso crema.
Las 4 cheesecakes de tendencia
Una vez diferenciadas los dos tipos básicos de cheesecake comienza la verdadera fiesta. Si sois unos auténticos fans de las tartas de queso sabréis de qué hablamos, la variedad de elaboraciones es infinita. Pasteles de queso tradicionales, con nombre propio, específicas de un país o región, con frutas fresca o mermelada, o la versión más lujuriosa con chocolate… Como es imposible poder dar cabida a todas ellas, vamos a hacer un repaso de las que en la actualidad consideramos son las 3 cheesecake de tendencia, en parte gracias al gran poder de las redes sociales.
New York Cheesecake
La tarta de queso estilo Nueva York es sin duda una de las tartas más imitadas y populares del planeta. Posee una mayor proporción de queso crema que otras elaboraciones, que se mezcla con huevos, azúcar y algún saborizante. De esta fórmula resulta un pastel de queso denso y extra cremoso. Su apariencia, con bordes elevados, es inconfundible.
Su versión más clásica tiene un método de horneado en dos tiempo, a alta temperatura primero y luego a más baja hasta su total cocción y suele llevar una costra de galletas como base. Tiene cientos de versiones, por lo que también podemos encontrar recetas de New York Cheesecake cuajada en frío. El Queso Crema Receta Original resulta ideal para este tipo de elaboración ayudando a conseguir una tarta horneada visualmente perfecta.
Pastel de queso japonés
Desde el lejano Oriente nos llega este tipo de cheesecake que es más parecido a un soufflé de queso que a un pastel por su textura aireada, mullida y elástica. Su característica esencial es la total ausencia de harinas y su mayor porcentaje de huevos que otras recetas. Las claras deben incorporarse batidas a punto de nieve con un movimiento envolvente y suave para que no nos baje la mezcla final. La tarta de queso japonesa tiene verdaderos adeptos que rivalizan por conseguir la receta más esponjosa y ligera, ¡debe derretirse en tu boca como una nube de algodón!
Para este tipo de cheesecake sin duda nuestro Queso Crema Natural se porta como un campeón, precisamente por ser un queso de sabor muy fresco y ligero que se adapta a las exigencias de textura que este postre requiere y nos ayuda a mantener la estructura tras el horneado.
Tarta de queso volcán
Una de las tartas de queso más de moda en la actualidad, especialmente en nuestro país, donde varios restaurantes compiten por la mejor receta de este explosivo pastel de queso ¿Cuál es el misterio? Se trata de una tarta cuajada al horno cuyo centro permanece líquido tras la cocción. Al cortar la tarta, el queso derretido saldrá como si de la lava de un volcán se tratara. Suelen tener un toque salino al añadirse quesos de mayor carácter tipo queso azul o manchego.
El éxito de la receta reside en parte en el manejo de la temperatura del horno, lo suficiente caliente para que cuaje y las paredes queden firmes y no se desmoronen, pero no excesivamente caliente para que no se solidifique su interior y pueda hacer honor a su nombre. Temperaturas alrededor de los 175º-180º suelen ser las más indicadas para llevar a buen término la elaboración.
Para hacer este tipo de tarta te recomendamos utilizar cualquiera de nuestros quesos crema sin sabor como base, en una proporción de 80-85% de la cantidad total de queso a utilizar, y añadir a la receta el Queso Crema con Queso Azul y la Crema de Queso con Queso Manchego. Las proporciones de estos dos últimos quesos variará en función de tus gustos personales o del sabor que quieras que predomine en tu cheesecake volcán.
Basque Cheesecake
No podemos dejar atrás, la tarta de queso vasca o tarta «de La Viña», también conocida como Burnt Basque cheesecake, y uno de los cheesecake de tendencia en la repostería mundial. Esta tarta de queso de tipo horneada es muy fácil de preparar y para elaborarla es ideal nuestro Queso Crema Natural, que le aportará la cremosidad, estabilidad en el horneado y suave sabor lácteo que necesita para ser perfecta. La tarta de queso vasca también queda muy bien añadiéndole un queso de sabor más fuerte, algo que podemos hacer de forma fácil con nuestro Queso Crema con Queso Azul para darle ese toque especial e irresistible como en nuestra receta de tarta de queso vasca con queso azul. Y si te gusta el chocolate, también lo puedes incorporar y disfrutar de una Basque Cheesecake de Chocolate.
Trucos y consejos para la cheesecake perfecta
Si tienes un negocio de repostería u hostelería y te enfrentas cada día al problema de tener que procesar y conservar en frío un volumen importante de repostería, entonces necesitas un queso crema especial para que tus elaboraciones soporten todo tipo de contingencias, sin desagradables sorpresas de última hora en catering o eventos especiales en los que se requiere una planificación previa importante. Para ello está pensado Quescrem Plus, un queso crema innovador y versátil que resiste las temperaturas extremas. Tus cheesecakes congeladas elaboradas con este queso crema todoterreno no cristalizarán al someterlas a temperaturas de congelación, ni generarán suero al descongelarlas. Tras el horneado observarás que tus tartas de queso descongeladas mantienen su estructura y cremosidad como si estuvieran recién hechas.
¿Necesitas un extra de cremosidad en tus elaboraciones? Una estupenda opción es sustituir totalmente o en parte el queso crema por queso mascarpone. Nuestro Mascarpone Quescrem tiene una textura muy cremosa y además de aportar un suave sabor lácteo a tu cheesecake, te permitirá reducir la cantidad de estabilizantes y de mantequilla. También está disponible en una versión de mascarpone sin lactosa.
Si necesitas un toque diferente con un punto más ácido y fresco en tus tartas de queso, te aconsejamos introducir quesos crema elaborados con leches diferentes a la de vaca. Este es el caso del Queso Crema Rulo de Cabra que aporta el intenso y característico sabor del rulo tradicional con todas las facilidades de manejabilidad, cero desperdicio ahorro de tiempo que te da el queso crema. Con este original toque de sabor tu cheesecake ¡dará que hablar!
La otra alternativa que te damos es el fresco sabor del yogur. Para ello te aconsejamos nuestro Yogur Culinario, un producto innovador 100% natural pensado para cocinar y que ha sido recientemente distinguido con el sello Sial Innovation 2018. Se trata de un producto único en el mercado, pues combina la textura del queso crema con el intenso sabor a yogur. Podrás crear con él una sorprendente cheesecake con sabor a yogurque sin duda destacará entre tus elaboraciones.
Con las diferentes alternativas que te hemos mostrado hoy sobre las formas de elaborar una cheesecake, estamos seguros que al volver a cerrar los ojos tu imaginación se disparará y tendrás miles de ideas en la cabeza que estarás deseando llevar a cabo en tu cocina. Te invitamos a compartirlas con nosotros a través de nuestras redes sociales y también a que nos plantees cualquier duda o sugerencia que tengas.
¡Estamos deseando ayudarte a elaborar la cheesecake perfecta!